La conducta denominada pasivo-agresiva (en adelante Trastorno de la Personalidad Pasivo Agresiva TPPA), es una forma indirecta de resistencia en la que la persona parece cumplir con las expectativas de lo que se espera de ella, así como de las necesidades de otras personas, pero que se resiste a llevarlas a cabo con conductas como la manipulación. Sería el clásico ejemplo de subalterno que dice que sí que tendrá el trabajo listo, pero que lo demora disculpándose, echándose la culpa por no responder a las expectativas, etc. 

No es sencillo identificar las conductas pasivo-agresivas, ya que suelen aparecer disfrazadas de un intento sincero por hacer las cosas. Generalmente, la forma en la que tenemos de detectar a estos sujetos con TPPA, suele ser de forma indirecta: mandos frustrados porque no consiguen implementar mejoras en los procesos, quejas de los clientes, demasiados cotilleos o una incapacidad de los equipos para finalizar los proyectos en los que están embarcados.

Reconocer a este tipo de sujetos es fundamental para no caer en sus redes, pues pueden pasar por personas tímidas, incapaces de hacer daño. Precisamente es ahí  donde muestran su naturaleza pasiva, que contrasta después con esos comportamientos agresivos que no consisten en golpear o insultar, sino, generalmente, en no hacer las cosas que les indicamos como forma de hacernos daño. Suelen mostrar unas características bastante comunes.

Son muy egoístas, siempre buscando la aprobación de los demás. Cuando hacen un trabajo, no piensan en los beneficios que ello reportará a la organización, sino en la imagen que de ellos mismo se proyectará a los demás. Aunque parezca que su trabajo va dirigido a los resultados, cuando rascamos un poco enseguida percibimos que lo único que persiguen estos sujeto con TPPA es su propio interés, no el bien común.

A estos TPPA no les interesa en absoluto formar parte de un equipo, especialmente, si no les sirve para sus propios intereses. Más bien necesita tener “seguidores”, pequeños grupos de fieles que jaleen sus logros. Porr supuesto, ellos siempre responderán tímidamente, como si no les importara.

Les gusta jugar con las personas, utilizando su inteligencia natural para llamar la atención de aquellos que les pueden benficiar en sus objetivos profesionales. Necesitan establecer alianzas de forma obsesiva para ir contra alguien que se opone a sus intereses. Estas alianzas también pueden servirles para “cargarse” la carrera profesional de otros.

Como están tan concentrados en los que hacen los demás, esto hace que no se centren en su propio trabajo. Cuando los observamos, parece que siempre estén muy ocupados trabajando, pero la realidad es no trabajan para el logro de objetivos que beneficien a la organización si no les beneficia a nivel personal.  

Aunque intenten vender lo contrario, a los TPPA no les gusta su trabajo. Suelen fantasear con otros compañeros sobre buscarse un nuevo trabajo, pero su inseguridad les impide lanzarse a nuevas aventuras profesionales.      

Algo que puede aplicarse a estos trabajadores con TPPA es que “la miseria ama la compañía” Buscan constantemente otros empleados que compartan sus quejas, pero nunca están dispuestos a buscar soluciones a lo que viven como injusticias y faltas de consideración.

Debido a su perenne inseguridad odian todo lo que sean nuevas ideas y conocimientos. Las iniciativas que plantean otros empleados las viven como una amenzza a su propio estatus y poder personal. Para contrarrestar estas iniciativas sulen decir cosas comom:” Ya se intentó antes y no funcionó , o “No me parece que sea algo relevante.”                

Vemos ahora algunas formas de afrontar este tipo de comportamientos, que pueden resultar muy destructivos para la organización. ¿Cómo suele actuar el empleado con un TPPA y qué podemos hacer al respecto?:

CONDUCTACÓMO SE EXPRESACÓMO RESPONDER
CulpabilizarseSe niega a decir lo que le pasa, racionaliza sus errores, evita tomar decisiones y emplea los problemas personales como una excusa para que otros hagan su trabajo.No hacer el trabajo que les corresponde. Documentar los hechos, realizar registros y evitar reacciones impulsivas.
IgnorarEmplear el silencio para provocar a otros. Ignorar las necesidades de los demás y excluir a los compañeros de trabajo.Clarificar las expectativas y “matar con compasión”. No tomarlo por el lado personal o responder con el silencio.
Hacerse la víctimaPoner excusas para encubrir el pobre desempeño. Apelar a la “compasión” de los demás por el trabajo excesivo.Observar el rendimiento y reiterar los plazos de ejecución. Ignorar la actitud de víctima.
ControlarManipulando a otros compañeros de trabajo, empleando amenazas veladas con los subordinados, desahogando su frustración.Hacer ver al sujeto que apoyar las ideas es más beneficioso como solución. No compartir las emociones.
ObstruccionismoComportamientos de “sabelotodo”, como el aferrarse a una opinión a pesar de las evidencias en contra.Hacer saber al sujeto que, tanto sus ideas como las de los demás, son importantes para el euipo.
Romper las reglas de compromisoPasando desapercibido para evitar tareas o eventos que no desea, programando trabajos o viajes para que resulte imposible cumplir con lo que se le solicita.Dejarle claro que sus intentos de evitar determinadas obligaciones son obvios. No discutir sobre quién tiene razón.
SarcasmoMostrar un humor u hostilidad falsos.Tratar de calmar la situación diciendo: “Eso sonó a sarcasmo”.
La puñalada por la espaldaArrogarse el crédito por el trabajo que han hecho otros. Tratar mal a los subordinados mientras se intenta jugar con otras figuras de autoridad. Sabotear el trabajo directamente o mediante chismes y cotilleos.Evitar responder con más chismes o provocaciones. No aceptar los errores cometidos por el sabotaje realizado.


(Meghna Bahl, 2010)

Algo que nos definirá rápidamente a un pasivo-agresivo en el trabajo es que le encargaremos una tarea y, de manera sistemática, no la hará, la demorará, etc. Cuando le preguntemos por qué pasa esto, dirá compungido que es culpa suya, que asume su responsabilidad, que no ha tenido tiempo…. Todo es manipulación: el objetivo es hacer daño con la inactividad. Es importante que las empresas desarrollen políticas de tolerancia cero en lo que se refiere a las acciones directas o indirectas realizadas por los empleados para interrumpir o interferir con el trabajo de otros. 

Fernando Pérez Pacho

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